Sun Life Stadium, el de los mil nombres
Por Ernesto Campos
Ya sea que el destino por carretera sea Miami, o que se vaya dejando esa ciudad rumbo al norte del estado de Florida, principalmente a Orlando, para los amantes al deporte sin duda será una vista espectacular encontrar de fondo el estadio de los Dolphins y de los Marlins, el ahora llamado Sun Life Stadium
Desde el Ronald Reagan o Florida Turnpike, el estadio ubicado en Miami Gardens recibe o despide a los visitantes y con ello propicia que los problemas viales para acceder a él no sean tan graves al encontrarse lejos de las zonas más habitadas y visitadas.
Un estadio que ha albergado cinco SupeBowls y dos Series Mundiales del beisbol ya puede considerarse histórico, lo mismo sus múltiples cambios de nombre que lo hacen líder en esta cuestión de mercadotecnia.
De tal forma ha sido bautizado como Joe Robbie, Pro Player Park, Pro Player Stadium, Dolphin Stadium, Dolphins Stadium, Land Shark Stadium y su actual nombre SunLife Stadium.
Aunque no se trata por mucho del estadio más moderno de la Liga, la casa de los Dolphins tiene algunas atracciones que lo vuelven diferente a los demás. Tiene su propio “antro” durante los partidos en los que pueden verse celebridades.
Considerando que el matrimonio de Gloria y Emilio Estefan son propietarios de una pequeña parte, lo mismo que los ex esposos J.LO y Marc Anhony, no es raro encontrarse a sus amigos, incluso algunas celebridades aparecen en pantalla dando su apoyo al alicaído equipo. El concepto se llama Liv Sun Life Stadium.
La Fan Zone te garantiza llevarte algún souvenir al invertirle 5 dólares al jugar a la ruleta o por lanzar el balón y medir tu precisión. Otra atracción es la Galería de las Leyendas, que encabeza el gran Dan Marino.
Los boletos pueden ser accesibles comparando los precios con los demás estadios en la Liga, comenzando con asientos en 34 dólares y terminando con algunos en más de 300. El equipo se acomoda a muchos bolsillos gracias a las tristes temporadas del equipo.
Para una visita turística lo mejor es rentar un carro y pagar los 25 dólares del estacionamiento, pues no tiene redes de transporte público constante que alimenten al estadio. Y por supuesto, una foto debajo del letrero del Dan Marino Boulevard no debe faltar.
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Chicago Bears – Soldier Field