¿Cuál es el estándar de los Cowboys para su afición?
Los Dallas Cowboys atraviesan por su única racha de victorias en toda la temporada 2020 tras hilar triunfos contra los Cincinnati Bengals y los San Francisco 49ers los últimos dos domingos, sin embargo, en el panorama general de las cosas, ser aficionado al equipo de la Estrella Solitaria es cada vez más difícil.
La de los Cowboys es una franquicia que, a pesar de ser relativamente joven en la liga, ha construido una historia de grandeza por sus múltiples aportaciones a la configuración de la NFL como la conocemos hoy y, sobre todo, por tener una tradición ganadora. Después de todo aún es el equipo que tiene el mayor número de temporadas con récord ganador de forma consecutiva (20) y el segundo mayor número de victorias en Super Bowl (5).
Los resultados y aportaciones a la liga han alimentado su aura de “El Equipo de América”, mote que resume su personalidad y los coloca en el lugar ideal para amarlos u odiarlos.
Expectativas vs. realidades
Tener los reflectores sobre ellos constantemente hace que las expectativas continuamente sean las más altas, y si nos remitimos a la última década (2011 a 2020) estas no han sido alcanzadas. Podríamos mencionar que la última ocasión en la que se cumplieron fueron tras la temporada 1995 cuando ganaron el Super Bowl XXX, sin embargo evaluar los últimos diez años parece más relevante para este ejercicio.
Siendo estrictos, en el periodo mencionado únicamente se han registrado dos temporadas perdedoras (incluyendo la que está por terminar) para un récord a la semana 15 de 2020 de 85-73. El problema no ha sido un equipo perdedor, lo ha sido estar en un limbo que no les permite separarse del montón; lo más revelador son las cuatro ocasiones en que el récord al final del año ha sido 8-8.
La afición ha tenido que sobrevivir a un periodo en el que Jason Garrett dirigió al equipo con tremenda tibieza, registrando en tres ocasiones diez o más victorias en la temporada solo para quedar eliminados en la Ronda Divisional de los Playoffs, dos de ellas siendo este su primer partido de postemporada (one and done).
La afición ha tenido también que aguantar la personalidad de un dueño preponderante en Jerry Jones, que mantiene una marca inmaculada y colocada como la más valiosa del mundo de acuerdo con la lista de Forbes, pero que, en su grandísimo deseo por ser el mejor en todo, muchas veces se tropieza con sus propios pies.
La decepción con Mike McCarthy
Parecía que las cosas podrían cambiar cuando se oficializó la salida de Garrett como head coach y la llegada de un tipo como Mike McCarthy, cuyo currículum parecía probado para llevar al equipo al siguiente nivel; sin embargo, el mentado año veinte-veinte hizo de las suyas y recortó sustancialmente la oportunidad del nuevo coach para instalar su sistema táctico y, sobre todo, una nueva cultura.
En lo que va del año, incluyendo el offseason, la afición tuvo ciertos momentos alentadores: la ya mencionada llegada de McCarthy, la selección del que parecía el mejor receptor de esta clase en el Draft y la historia de redención de Aldon Smith. Esto escaló con un espectacular regreso en la semana 2 contra Atlanta, en el que se recuperó una patada corta como nunca antes se había visto.
Sin embargo también han sucedido cosas tan preocupantes como:
- No poder cerrar un acuerdo de largo plazo con su quarterback franquicia
- Un staff de coacheo incapaz de transmitir sus enseñanzas al roster
- Una montaña de lesiones en diferentes puntos clave del cuadro titular tanto a la ofensiva como a la defensiva, incluyendo una muy aparatosa de su mencionado quarterback
- Cuatro jugadores distintos como quarterbacks titulares durante la temporada
- Una defensiva históricamente mala
- Un escándalo mediático en el cual los jugadores se tornaron en contra del staff de coacheo
- La primera vez en la historia del equipo en la que la NFL decide que un partido de Dallas “no es lo suficientemente atractivo” para ser transmitido en horario estelar y fue movido de dan inicio a las 7:30 de la noche a las 12:00 del mediodía.
- Ser uno de los pocos estadios de toda la liga que no cerró sus puertas en ningún momento de la temporada en medio de una pandemia y constantemente ha permitido la entrada de entre 20 y 30 mil personas a cada partido.
Ser fan de los Cowboys se ha tornado difícil
Todo este cúmulo de situaciones ha dado como resultado momentos vergonzosos como ser apaleados en horario estelar por Cardinals, Eagles, Washington Football Team y Ravens.
También así explica por qué la afición de este equipo está envejeciendo y cuesta mucho trabajo encontrar a un menor de 30 años cuyo equipo favorito sean los Cowboys. Los aficionados de cepa, que llegaron con los momentos de gloria de la década de los 70 y de los 90, siguen y seguirán ahí, y son ellos los quienes pueden atestiguar que ser aficionado de los Cowboys se ha convertido en una labor muy complicada.
¿Cuál es el estándar que deben fijar los Cowboys para su afición? Te leemos en los comentarios bajo este artículo y en nuestras redes sociales.