Los campeones olvidados de la NFL Parte IV

Continuamos con la serie de los Campeones Olvidados en su cuarta entrega, pueden checar aquí la primera, segunda y tercera partes para ponerse al día.

En un resumen del capítulo pasado recordamos a los Philadelphia Eagles y sus leyendas como Steve Van Buren, Chuck Bednarik y Norm Van Brocklin. Recordamos al inmortal Johnny Unitas y su historia con los Baltimore Colts, así como también hablamos de la dinastía de los Detroit Lions durante los años 50 de la mano de Bobby Layne.

Antes de pasar a los protagonistas de esta serie, viene la lista de los campeonatos que hemos citado hasta ahora:

Akron Pros: 1 campeonato ,1920.

Cleveland Bulldogs: 1 campeonato, 1924.

Frankford Yellow Jackets: 1 campeonato, 1926.

Providence Steam Roller: 1 campeonato, 1928.

Minnesota Vikings: 1 campeonato, 1969.

Canton Bulldogs: 2 campeonatos, 1992-1923

Chicago / Arizona Cardinals: 2 campeonatos, 1925,1947

Washington Redskins: 2 campeonatos, 1937,1942

Cleveland / Los Angeles Rams: 2 campeonatos, 1945,1951

Philadelphia Eagles: 3 campeonatos, 1948, 1949,1960

Baltimore Colts: 3 campeonatos, 1958, 1959,1968

Detroit Lions: 4 campeonatos, 1935, 1952, 1953, 1957

Continuamos con las franquicias que ganaron cuatro títulos, auténticos campeones olvidados de la NFL con grandes historias que contar.

 

New York Giants

Campeonatos: 4 (1927, 1934, 1938,1956)

El equipo de la Gran Manzana. El patriarca, Tim Mara, era un corredor de apuestas, al igual que su amigo y fundador de los Steelers. Art Rooney. En aquellos años la práctica era legal y Mara consiguió la franquicia por 500 dólares, cantidad muy fuerte para la época.

La primera temporada del equipo llegó en 1925, una temporada bastante buena que finalizó con un record de 8-4. A pesar de ello la gente no estaba muy interesada en el football profesional y los Giants sufrieron bastante en su situación financiera. La franquicia se unió a famosa gira de la superestrella colegial Red Grange de los Bears, de quien hablaremos a fondo en la próxima entrega. Este partido en casa dio a los Giants un gran respiro financiero con la gran asistencia del público, además de ponerlo por fin en el mapa deportivo nacional.

En 1926 nuevamente tuvieron una sólida temporada con un record de 8-4-1, y la constancia por fin rindió frutos al año siguiente, pues en 1927 los Giants se fueron 11-1-1 y con un porcentaje de .917, lejos de su más cercano competidor, los Packers de 7-2-1 y .778. De esta manera los Giants levantaron su primer trofeo como campeones en la NFL.

Luego de una decepcionante temporada en 1928, Tim Mara decidió comprar al equipo entero de los Detroit Wolverines solamente para hacerse de los servicios del QB Benny Friedman, quien un año antes había sido comprado junto con sus compañeros y los Canton Bulldogs por Eliot Fisher para formar a los mencionados Wolverines.

Gracias a dicha adquisición los Giants se volvieron una potencia para la temporada de 1929 y de la mano de Friedman acumularon un record de 13-1-1, la mala noticia es que la única derrota llegó a manos de los Packers quienes terminaron con un record de 12-0-1 y, por tanto, una temporada perfecta que les dio el título a los de Wisconsin.

En 1930 New York nuevamente quedó relegado en la carrera por el título detrás de los Green Bay Packers. Para finalizar la temporada, los Giants enfrentaron al equipo All Stars de Notre Dame a quienes vencieron en el que fue un juego muy significativo para la liga, pues la NFL como football profesional se ganó el respeto de la gente que aun pensaba que el football colegial era mejor.

En 1931 Benny Friedman tendría su último año con el equipo. En aquellos tiempos oscuros para el juego aéreo, el pase hacia adelante tenía demasiadas restricciones y no era tan empleado por los equipos. Sin embargo, fue gracias a Friedman que la NFL empezó a utilizar el pase hacia adelante como estrategia desde el Primer Down. Benny Friedman fue el Steve Young de su época.

Ya con el coach Steve Owen a la cabeza del equipo desde 1931, los Giants se reconstruyeron y en 1933, ya con la realineación de la NFL en dos divisiones, disputaron el primer juego de Campeonato ante los Chicago Bears, representando a la división del Este. El juego lo perdieron apenas por dos puntos (21-23), pero acababan de crear el sistema que mantendrían hasta la fusión de 1970.

En 1934 los Giants tendrían su revancha, con marca de 8-5 ganaron nuevamente su división y ser anfitriones del juego de Campeonato para enfrentar a los todopoderosos Bears con marca de 13-0, ¿les suena familiar? .

El suelo estaba casi congelado y los Bears vencían con tranquilidad 10-3 al medio tiempo. El ala defensiva Ray Flaherty le había comentado al coach Owens que si usaban tenis “sneakers” tendrían mayor estabilidad, así que una persona del staff sustrajo los tenis de un equipo de basketball y llegó al medio tiempo con los tenis listos para los jugadores. Chicago anotó 3 puntos para extender la ventaja y a partir de ese momento ocurrió el milagro los Giants: marcaron 27 puntos de manera consecutiva dejando a los Bears tendidos en el campo 30-13 con su marca (casi) perfecta. Además del título y la revancha de 1933, New York recibió el trofeo Ed Thorp Memorial por primera vez para un equipo en la NFL.

En 1935 los Giants llegaron al juego de Campeonato por tercer año consecutivo pero esta vez cayeron con los Detroit Lions. Sin embargo, en 1938 vencieron a los a los Green Bay Packers para conquistar su tercer título. En 1939 intentaron repetirlo pero los Packers obtuvieron su revancha en el juego de Campeonato.

1941 sería un año muy significativo para los Giants pues de nuevo tuvieron una gran temporada hasta el juego de Campeonato. En la última fecha de la Temporada Regular, New York enfrentaba a los Brooklyn Dodgers el 7 de Diciembre. Mientras el juego se disputaba, sobre el Océano Pacifico la armada imperial japonesa bombardeó el Pearl Harbor. El palco de prensa anunció el ataque al medio tiempo y el juego continuó. El novato Jack Lummus de los Giants sería un par de años más tarde una de las victimas que dejó la guerra.

Ya en el juego de Campeonato, la asistencia fue muy baja en gran parte por la incertidumbre de la guerra. Los Bears se impusieron a los Giants, quienes a partir de ese momento, igual que muchos equipos en la liga, vendrían a la baja por la Segunda Guerra Mundial.

La franquicia tuvo un par de apariciones más en el juego de Campeonato en 1944 y 1946 pero tuvo que esperar hasta 1956 para ganar un título. Sería nuevamente ante los Chicago Bears, esta vez de la mano del coach Jim Lee Howell, quien tenía entre sus asistentes a las leyendas Vince Lombardi y Tom Landry. Los Giants vencieron a los Bears en el mítico Yankee Stadium.

Este sería su último campeonato antes de la fusión y pasaron tres décadas para conquistar nuevamente la gloria, pero el equipo se mantuvo en la élite de la NFL. En 1958 fue protagonista del Greatest Game Ever Played y en 1959 nuevamente cayó ante los Baltimore Colts de Unitas.

En 1961 llegó a New York el legendario QB Y.A Tittle, quien de inmediato devolvió franquicia a los primeros planos. A pesar de ello, su éxito se vio opacado por el la leyenda de un viejo conocido, Vince Lombardi quien se encargó de arrebatarle el título a los Giants en 1961 y 1962. En 1963 Tittle logró una de las temporadas más memorables para un QB al imponer record de 36 pases de TD, mismo que fue superado hasta Dan Marino. Tittle consiguió tres MVPs en su paso por los Giants, pero no pudo ganar un solo campeonato y perdió el juego final de 1963 ante los Chicago Bears.

Tras el retiro de Tittle en 1964, el equipo se desplomó hasta la fusión del 70, sin embargo los New York Giants tienen historia de sobra para reclamar el podio entre los campeones olvidados de la NFL, misma que han enriquecido con sus logros contemporáneos.

 

Cleveland Browns

Campeonatos: 4 (1950, 1954, 1955,1964)

Equipo fundado por el empresario Arthur McBride en 1944, franquicia fundadora de la AAFC League que arrancó operaciones en 1946. McBride se acercó al coach Paul Brown para dirigir a su equipo, pues ya se había convertido en una leyenda viviente en el estado de Ohio por su éxito en High School y College.

El nombre de los Browns es en honor al mismo Paul Brown, aunque el coach en un principio mencionaba que el nombre era por el boxeador Joe Luis, apodado “Brown Bomber” y uno de los mejores de la historia.

Se dice que la destrucción es una oportunidad para crear algo bueno; con la Segunda Guerra Mundial ese fue el caso de la AAFC. La liga tuvo la oportunidad de firmar a muchos jugadores que regresaban de su servicio militar, los cuales de no ser por la guerra hubieran jugado probablemente en la NFL. Ese fue el caso de Otto Graham, seleccionado por los Detroit Lions con el pick 4 del Draft de 1944 pero que terminó jugando con los Browns, quienes le ofrecieron un gran contrato mientras terminaba su servicio militar.

Otros jugadores llegaron gracias a sus nexos con Ohio State, y algunos más gracias a la relación que formaron con Paul Brown en el ejército. Otros cinco jugadores que pertenecían a los Cleveland Rams, apelaron cuando el equipo se movió a Los Angeles, con el argumento que fueron contratados para jugar en Cleveland, logrando así salir de su contrato para quedarse en la ciudad y con los Browns.

Los Cleveland Browns arrasaron con la AAFC. Eran tan buenos que tuvieron que proveer a la liga de jugadores como fue el caso del mítico Y.A Tittle quien ya había firmado un contrato con los Browns pero el comisionado dio marcha atrás para que fuera con los Baltimore Colts y darle paridad a la liga. De 1946 a 1949 los Browns ganaron todos los títulos disputados, lo cual fue malo hasta cierto punto para la AAFC pues el público dejó de asistir a sabiendas de que los Browns ganarían todo.

Ante este panorama, los directivos de la AAFC se acercaron a la NFL para programar una especie de “Super Bowl”, entre el ganador de la AAFC y de la NFL pero esta última no accedió. Finalmente, ante el buen mercado de algunas ciudades, la NFL decidió fusionarse con la AAFC, pero solamente aceptando a los Browns, Colts y Niners intactos, mientras que los demás equipos se disolverían en un Draft para proveer a los equipos de la NFL.

El equipo de Cleveland era la carta fuerte de la AAFC, pero todos sus records serian negados para el registro oficial, olvidando sus cuatro campeonatos en la AAFC. La NFL estaba conformada por hombres de football, apostadores y otros involucrados de lleno en el deporte, mientras que los equipos de la AAFC eran el juguete de exitosos empresarios. La NFL decía que la AAFC era una liga menor, que no representaba competencia. Probablemente estaban en lo correcto pero los Browns eran punto y aparte.

El calendario estaba marcado: el 16 de septiembre de 1950 los campeones de la NFL, Philadelphia Eagles, recibirían a los novatos Cleveland Browns, campeones de la AAFC. No era el Super Bowl pero sí un juego con gran morbo, más de 70 mil personas asistieron al juego para ver a sus Eagles. Los Browns aplastaron a los Eagles y dejaron en ridículo a la NFL, 35-10 fue el marcador. El legendario coach Greasy Neale, luego del juego menciono que los vencedores no eran un equipo serio y que solamente pasaban el balón por todo el campo como un equipo de basketball.

Los Browns tuvieron un buen record aquel año, con registro de 10-2, ambas derrotas propinadas por los New York Giants, rivales de división que también terminaron 10-2. Las reglas establecían un juego de desempate por el boleto al juego de Campeonato y esta vez los Browns vencieron 8-0 a los New York Giants para enfrentar a sus ex vecinos, Los Angeles Rams. El juego se disputó en Cleveland con tremendo juego entre Otto Graham y Bob Waterfield y finalmente los Browns conquistaron su primer campeonato tras vencer a los Rams 30-28.

El equipo de Paul Brown acababa de cruzar la puerta de una gran época con seis juegos de Campeonato disputados de manera consecutiva, aunque no todo fue gloria. En 1951 Los Angeles Rams tendrían su revancha en el juego de Campeonato venciéndolos 24-17. En 1952 y 1953 la historia se repetiría a manos de los Detroit Lions, 17-7 y 17-16 respectivamente. Los Browns eran un equipo poderoso pero no podían volver a ganar el juego grande; Otto Graham consideraba el retiro pero se quería ir como ganador.

En 1954 llegó el premio. Apenas una semana antes del juego de Campeonato Detroit había derrotado a Cleveland 14-10. Los Lions estaban mentalizados para el tercer campeonato en fila pero Paul Brown y Otto Graham tenían otros planes. Ese día todo salió para los Browns: con 3 pases de TD y 3 por tierra, Otto ”Matic” Graham aniquiló a los Lions 56-10 para conquistar su segundo título de la NFL y la cereza en el pastel de su carrera de nueve temporadas disputando un juego por el título y seis victorias. Así Graham se retiraba como uno de los mejores quarterbacks en la historia.

Pero la misma historia le tenía una propuesta reservada a Graham. Brown no pudo encontrar un remplazo y necesitaba de su viejo pistolero una temporada más. Luego de convencer a Otto, los Browns se pusieron en camino hacia su tercer campeonato.

Cleveland finalizó la temporada 9-2-1 y el rival para el juego de Campeonato seria un viejo conocido, Los Angeles Rams, con quienes habían dividido victorias entre 1950 y 1951. Esta vez el último viaje de Graham sería positivo, ganando el juego 38-14 y al final con ovación de pie por parte de la afición de Los Angeles. El ciclo estaba cerrado, el último éxito de la era Brown-Graham se había consumado: diez juegos de Campeonato, siete ganados.

La resaca de ese campeonato fue dura para Paul Brown, quien siguió sin tener un QB para remplazar a Graham y su equipo terminó perdiendo los Playoffs por primera vez desde su creación, aunque no tendría que esperar mucho para ponerse en el mapa nuevamente. En 1957, con la sexta selección global del Draft, reclutaron a quien para muchos es mejor jugador que la NFL de todos los tiempos, Jim Brown.

Aunque Cleveland estaba en restructuración tras la partida de varios jugadores importantes, Jim Brown tomó por asalto a la NFL, y ganó el primer MVP de su carrera como novato, llevando al equipo hasta el juego de Campeonato de 1957, donde cayó ante los Detroit Lions.

Durante los próximos años, los Giants y Browns pelearían por la cima de su división. En 1958 jugaron un juego de conferencia previo a The Greatest Game Ever Played, en el que se impusieron los de New York. En 1961 Art Modell compró al equipo y al poco tiempo la relación entre Paul Brown, Jim Brown y Modell empezó a ser toxica. Tras la campaña de 1962, Modell despidió al legendario coach Paul Brown.

Los Browns, ahora bajo el mando de Blanton Collier, consiguieron una marca de 10-4 pero una vez más quedaron detrás de los Giants. En 1964 inició la campaña de gloria para Jim Brown y los Cleveland: luego de terminar la temporada con marca de 10-3-1 de la mano de Jim y el QB Frank Ryan, viajaron al juego de campeonato para enfrentar a los favoritos Baltimore Colts de Johnny Unitas y el joven Don Shula.

Los Browns se impusieron con un gran juego de Ryan y Gary Collins, quienes se combinaron en tres ocasiones para dejar un contundente 27-0 en el marcador, Jim Brown alzaba así el que sería su único campeonato, el cuarto de la franquicia y el último hasta el momento.

En 1965 Cleveland cayó en el juego de Campeonato ante la dinastía Lombardi, en lo que sería el último año sin el famoso Super Bowl.

Brown se había vuelto una estrella dentro y fuera del campo, probando fortuna como actor. El rodaje de la película The Dirty Dozen se empalmó con el Training Camp del equipo, por lo que Art Modell le aviso que sería multado por cada día de ausencia. Ante este castigo, Jim Brown dejó la NFL tras nueve temporadas, cuatro MVP y su nombre como el mejor jugador en la historia de la NFL.

Durante los siguientes años nació una breve rivalidad con los jóvenes Dallas Cowboys, dividiendo la corona de la división previo a la Fusión. Los Browns regresaron al juego de Campeonato en 1968 y 1969, donde cayeron ante los Baltimore Colts y los Minnesota Vikings, los últimos campeones olvidados de la NFL.

Con la Fusión de 1970, los Browns pasaron a la Conferencia Americana e iniciaron esta larga época de derrotas y frustraciones que hoy en día no logran superar. Alguna vez los Browns fueron el equivalente a los Patriots y hoy en día, un equipo protagonista… de los últimos puestos. Una franquicia que se atrevió a retar a la NFL y salió victoriosa en múltiples ocasiones, los Cleveland Browns son un verdadero campeón olvidado.

Terminamos la entrega de esta semana, ya estamos con la pretemporada encima y para terminar esta serie nos falta revisar a los equipos más grandes y de mayor tradición en la NFL: los Chicago Bears y los Green Bay Packers, en dos capítulos que serán publicados de manera individual para dar el merecido espacio a tan gloriosas franquicias.

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