CB Devon Witherspoon, Seattle Seahawks

CB Devon Witherspoon, Seattle Seahawks

Seahawks dominan en New York; ¿es el fin de los Giants?

Los Seattle Seahawks son el tercer equipo en demoler lo que queda de los New York Giants, ahora por marcador de 24-3. Esta nueva derrota comienza a generar una sensación de fatalismo en la gran manzana, y es difícil culparlos; ni el HC Brian Daboll puede repetir su toque mágico en un conjunto que está muy lejos de siquiera mostrar algo de coraje cada semana.

Los Seahawks fueron inmisericordes

En su camino a ganar la NFC West no se pueden permitir muchas derrotas, así que estar 2-1 los obligaba a salir a ganar en este partido, y vayan que lo hicieron.

El HC Pete Carroll debe estar orgulloso de la manera en que ha logrado que el QB Geno Smith recupere su carrera profesional, pero hoy no tuvo que hacer mucho (13/20, 109 YDS, 1 TD) como en otros partidos. De hecho, la defensiva fue la que se llevó su estrellita al final de las acciones y es ahí donde Carroll debería sentirse más satisfecho.

Pasaron los años, la Legion of Doom se fue hace mucho, pero la sensación de esta defensiva renovada a paso del Draft NFL, es que finalmente están logrando su propia versión en este momento.

El CB Devon Witherspoon ha sido toda una adquisición y se convirtió en apenas el primer defensivo con dos capturas y un TD de 95 yardas en un partido de la NFL, novato o no. Junto a él, los jugadores de años pasados como el CB Riq Woolen y el LB Boye Mafe son parte de una base que promete muchos años ilustres. ¿Serán tan buenos como sus antecesores? Es muy pronto para decirlo, pero en este juego lograron 11 capturas y solamente permitieron tres puntos de visitante.

Los Giants aún no llegan a esta temporada

El equipo ha estado fatal en su inicio de temporada. Incluso cuando ganan no dejan de generarnos dudas y es lamentable el poco talento que tienen (y por el que han invertido) tras clasificar a playoffs hace meses.

Desde 2013, un equipo no anotaba cinco o menos puntos en sus primeros dos juegos en casa (Jaguars), y en 40 temporadas, los Giants son el peor de todos los locales en ese sentido. Por el contrario, esta temporada les anotaron 64 puntos y el diferencial es de 61 en contra.

El mayor problema, además del pobre desempeño del QB Daniel Jones, es todo lo demás; la línea ofensiva es un desastre y ningún receptor logra generar temor en el campo. También sorprende la nula creatividad del mismo sujeto que estuvo detrás del ascenso del QB Josh Allen en Buffalo y el año pasado podía sacar jugadas con menos personal.

Por tierra no hay mucho en que apoyarse. Si quitamos las 6.6 yardas en promedio de Jones, ningún corredor logró las 2.3 yardas por acarreo en este partido.

Ni que decir que la flamante adquisición, TE Darren Waller, es como un cero a la izquierda. Apenas tres pases atrapados para 21 yardas, tal vez por Jones y su errático comportamiento o su inevitable caída en cuanto a talento, realmente se extraña el tipo de hace dos años en los Raiders.

La defensiva no es nada mejor, siendo un festival de errores en tackleadas y eclipsa el trabajo de jugadores como el DE Kayvon Thibodeaux, que pese a sus dos capturas, no puede lograr que sus compañeros se contagien de su energía. Y quizás esto último es el mayor defecto de este equipo.

De luna de miel a luna de hiel con Brian Daboll

Haber clasificado a playoffs la temporada pasada ha hecho más mal que bien en retrospectiva para los Giants. Nadie niega que ganar es positivo, pero da la sensación de que se autoengañaron enfrentando a rivales más débiles de los que enfrentarían este año y su evaluación en la offseason fue basada en eso.

Ahora que enfrentaron a Cowboys, 49ers y Seahawks, realmente no existe manera de verlos a su altura. Un entrenador llega hasta donde su plantel puede, y este es el mejor ejemplo:

Aunque hubo ausencias importantes, el detalle es que no se trata de un equipo con una o dos ausencias notorias, sino uno que en general está completamente desangelado y es triste de mirar. Es fácil culpar al contrato de Jones, pero alguien dentro de la organización debería preguntarle al GM sobre lo que verdaderamente está haciendo porque en dos años es un roster prácticamente igual y limitado.

¿Qué crees que deba pasar con estos Giants? ¿Los Seahawks encontraron a su Legion of Doom 2.0? Puedes dejarnos tus comentarios debajo de este artículo o a través de nuestras publicaciones en redes sociales.

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