Jeff Saturday, la apuesta de media temporada de los Colts – Negocio NFL

Jim Irsay es todo un personaje. No es solo el propietario de los Indianapolis Colts en la NFL; es, sobre todo un hombre de negocios que cuida sus intereses, uno muy consciente de su personaje y de que está en el ojo público, por lo que siempre busca el giro positivo de toda situación. Veamos cómo esto aplica en el nombramiento de Jeff Saturday como head coach de su equipo acontecido este día.

Un dueño NFL acostumbrado a la presión

Recordemos que en 2018, negoció y cerró un contrato con Josh McDaniels para que fuera el Head Coach de su equipo, solo para que lo dejara vestido y alborotado, por lo que mandó a Chris Ballard, el General Manager a quien trajo solo un año antes, al frente de la línea de batalla en un conferencia de prensa en la que dijo que “la rivalidad había revivido” a partir de ese momento.

Probablemente el incidente más escandaloso que ha protagonizado fue cuando en 2014, fue arrestado bajo la sospecha de conducir intoxicado y por posesión de drogas, todo esto en una época en la que se hablaba de que tenía un problema de adicción, el cual fue maximizado cuando posteriormente salió a la luz que su amante había muerto por una sobredosis en una casa que adquirió con dinero del equipo. Todo esto lo hizo sujeto de un año de libertad condicional, una suspensión de parte de la NFL y una multa de medio millón de dólares.

Recientemente, fue él quien señaló públicamente que había méritos suficientes para que Daniel Snyder fuera removido como dueño de los Washington Commanders, alegando que su conducta iba en detrimento de toda la liga. Lo interesante fue que se puso a sí mismo como ejemplo, y usó su propio caso como ejemplo de lo Snyder estaba dejando de hacer, que es reconocer su mal actuar asumir las consecuencias y enmendar el camino.

Toda esta lista es para ejemplificar cómo Irsay es un hombre que no es ajeno al escándalo y que está acostumbrado a manejar situaciones de crisis de imagen pública.

Lo más reciente es ahora el tener que despedir a Frank Reich, el hombre al que trajo para llenar el vacío que súbitamente se creó con el desaire de McDaniels. Ese coach que a pesar de haber tenido un QB diferente cada temporada (Andrew Luck, Jacoby Brissett, Phillip Rivers, Carson Wentz y Matt Ryan), acumuló un récord de 40-33-1 y llevó al equipo a un par de apariciones en Playoffs, pero que recientemente parece que perdió la brújula al enviar a Ryan a la banca y decidir ir con Sam Ehlinger.

Ante esto, Irsay ha recurrido nuevamente a su búsqueda de un giro positivo. La respuesta esta vez la encontró en un viejo conocido: Jeff Saturday, quien será el coach interino del equipo en la segunda mitad de la temporada 2022.

Jeff Saturday, una figura para reconectar con el equipo

Con este nombramiento, Irsay ha recurrido a una figura perfectamente cimentada en la identidad del equipo. Se trata nada menos que la gran pareja del legendario Peyton Manning, el hombre que desde la posición de centro le entregó el balón snap tras snap en prácticamente toda su estancia en Indianapolis (excepto por el año de novato del QB). Un jugador que fue nombrado 6 veces al Pro Bowl, 2 veces al equipo All-Pro, que formó parte del equipo que ganó el Super Bowl en 2006 y que forma parte del Anillo del Honor del equipo desde 2015.

Este es un movimiento de bajo riesgo y alta recompensa, comenzando por el hecho de que Saturday es un hombre de toda la confianza de Irsay, por lo que el propietario tendrá ojos y oídos en cada rincón del vestidor, lo que le dará una idea muy clara del pulso del equipo.

Al traer a una figura de su talla, el mejor escenario es que toda la agudeza que Saturday demostró en el campo se transforme ahora en planes de juego inteligibles y que coloquen a sus jugadores en la mejor posición para ganar. Habitando una AFC Sur en la que cualquier cosa podría pasar, si el equipo se enracha, en un descuido, podría llevarse el título y meterse a Playoffs.

En este escenario, Irsay quedaría como un verdadero genio que se tropezó con una pieza de oro, ya que la experiencia de Saturday como coach es solo a nivel preparatoria, lo cual lo convierte en el primer entrenador en jefe de la liga sin experiencia previa en la NFL desde Norm Van Brocklin en 1961.

Lo rescatable si todo sale mal

En el extremo opuesto, está una situación en la que Saturday hace uso de su facilidad de palabra, conecta con los jugadores, que empatizan con él gracias a su pasado como jugador, y consiguen unas cuantas victorias, más por producto de la motivación que de sustancia de football puro y duro.

Aquí el beneficio está en que los Colts rondarían, digamos, los 5 o 6 triunfos en el año, asegurando así una buena posición en el siguiente Draft, donde, ahora sí, se harían de un QB joven y promisorio dándole la vuelta a la fórmula de traer a un veterano en la parte final de su carrera.

En pocas palabras; si las cosas salen bien Irsay habrá descubierto a una gema que nadie tenía en el radar y rescataría una temporada que parece completamente perdida. Si las cosas salen mal, le habrá dado a la gente la satisfacción de ver a una de sus más grandes figuras locales al frente de su equipo, afianzando así la idea de que es un hombre que actúa con la afición en mente y además obteniendo la recompensa de una selección alta en el siguiente Draft.

Gran movimiento, Jim Irsay. Esto es Negocio NFL.

¿Qué te parece la apuesta de los Colts por Jeff Saturday como su nuevo head coach? Te leemos debajo de este artículo y en nuestras redes sociales. También puedes proponernos temas de logística, front office y negocios de NFL que te interese que toquemos en este espacio.

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