Todd Bowles, head coach de los Tampa Bay Buccaneers.

Hora de candidatear a Todd Bowles para la silla caliente

Los Tampa Bay Buccaneers no levantan cabeza este año y, tras caer 27-22 en casa frente a los Ravens, lograron conectar su tercera derrota en fila esta temporada. El equipo no parece tocar fondo en este momento, en su lugar, parece estar en una espiral descendente sin control. En definitiva, es momento de hablar del trabajo de Todd Bowles, su head coach.

Y es que tras heredar un equipo contendiente, con Tom Brady incluido, no se puede ignorar el desastre que se avecina por esta falta de capacidades en el cargo.

Ni Tom Brady es suficiente para salvar este barco

Muchos pensarán que el tiempo alcanzó al QB Tom Brady, pero la verdad, estamos lejos de una situación como la del último año de Peyton Manning en Denver; en las últimas seis semanas, el veterano promedia más de 40 intentos de pase y arriba de 243 yardas por encuentro, incluyendo contra Ravens, donde lanzó 325 yardas en 44 intentos de pase.

Sin embargo, no es difícil imaginar porque lo creerían, sobre todo con el veterano experimentando cosas que nunca le habían pasado; por ejemplo, jugar con récord perdedor por más de una semana en la NFL y siendo el QB titular del equipo. Hablamos de que en casi 23 años de carrera, jamás estuvo en un conjunto por debajo de la media. Sin duda, con datos así, hasta parecen sonar las trompetas del apocalipsis.

Pero para que se den cuenta de lo grave que es, esta base de jugadores ha sido prácticamente inalterable en los últimos tres años. No obstante, este retroceso es brutal, y no deja de resonar por las diferencias que se ven con un staff de entrenadores, que, quizás, recibieron una oportunidad demasiado grande para ellos, conduciéndolos a una preocupante crisis.

La silla ya arde para Todd Bowles

No todos los coordinadores exitosos funcionan en el puesto de head coach; en el ámbito de la propia NFL, esto es como la transición del QB del colegial al profesional, donde no por ganar el trofeo Heisman, se va a ganar el MVP de la temporada o el Super Bowl. En el caso de los Bucs es más que evidente.

Coordinando la defensiva, Todd Bowles pudo dar un plan de juego brillante para humillar al QB Patrick Mahomes en el Super Bowl LV; no obstante, ahora como head coach, el que está pasando vergüenzas es él. En retrospectiva, pensar que lo haría bien esta vez, era pecar de ingenuos.

Habría que remontarnos a su época en los Jets, y entender que nunca estuvo hecho para tanta responsabilidad, menos para obtener títulos y récords importantes en el proceso; en cuatro temporadas solo obtuvo 24 triunfos para los neoyorquinos y tiene 46 derrotas en su haber, para un récord hasta ahora de 29-46; en buena medida, porque sus ataques siempre han sido lamentables como ahora, que se ubica en los últimos lugares de la liga.

Llegar a un punto donde ni los errores groseros de John Harbaugh son suficientes para ganar el juego, que prácticamente regalaron oportunidades de dominar al oponente, habla muy mal de un staff de entrenadores, que padece ineptitud peligrosa.

En consecuencia, no hace más que extrañar aún más la figura de Bruce Arians, que luego de construir un equipo contendiente por años, hoy ni siquiera aspira a un boleto de comodín en la debilitada NFC.

A un metro del precipicio

Muchos no terminamos de entender que ha ocurrido del todo, porque revisando un poco: la defensiva sigue siendo dura de vencer, Tom Brady aún puede lanzar como antes, pero las cosas no se están dando. Pero quizás es porque menospreciemos la figura del head coach, y es momento de reivindicarla.

Todo gran jugador necesitó de, al menos, un entrenador arriba del promedio para conquistar un título o llegar a acariciar el trofeo Vince Lombardi; Peyton Manning, John Elway, Joe Montana, ni Tom pudo escapar de esta regla. Al final de cuentas, la grandeza tiene su tope en los propios límites que nos impone el ser una persona de carne y hueso.

Para ganar una carrera, no solo se necesita de un gran auto y un extraordinario conductor, a veces, también se requiere de un buen mecánico que sepa dar las mejores condiciones para el éxito. Solo que los Bucs no lo entendieron en su momento.

¿Qué opinan de la crisis de los Buccaneers? Coméntenos sus reflexiones sobre el tema debajo de este artículo o a través de nuestras publicaciones en redes sociales.

Comments (1)

  1. Creo que llevas parte de razón….este HC no está haciéndolo bien. Aunque puede ser que la culpa no sea del todo suya.
    No creo que el final de Manning pueda compararse al final de Brady…..entre otras cosas porque Brady tiene 7 SBs y tiene derecho a ser un engreído. El tipo de jugadas que hacía Manning el último año que jugó y ganó el SB eran pases cortos pases pantalla y carreras….su HC lo supo aprovechar. Sin embargo el HC de Bucs….no sé si será él u órdenes directas de Brady, manda el juego como si Brady jugará hace 10 años. Es cierto que Evans ha fallado algunas recepciones….es cierto que Fournette este año está corriendo algo peor. Pero cuesta reconocer que Brady también tiene lanzamientos desviados y algunos excesivamente largos….que al contrario de las caídas de balón de Evans…..no sé hacen virales.
    Así que creo que este HC debe adecuar las jugadas de pase a Tom Brady 45……porque guste o no ya no juega como Tom Brady 35.

Deja tu comentario