QB Jimmy Garoppolo, San Francisco 49ers
49ers vs Titans: quarterbacks y equipos con realidades muy distintas
La Semana 16 de la Temporada NFL 2021 da inicio con duelo interconferencia de Thursday Night Football entre 49ers y Titans, dos equipos con récord similar, pero ritmo muy distinto. San Francisco llega enrachado, con cinco victorias en las últimas seis semanas y marcando el paso como Wild Card dentro de la NFC. Por su parte, Tennessee no puede darse el lujo de otra derrota; un descuido más y su liderato de la AFC South podría complicarse en demasía.
Este es el panorama de ambos rumbo al encuentro de jueves por la noche.
49ers, el equipo al que nadie desea enfrentar
Tras un fatídico inicio de temporada con récord de 3-5, los 49ers (8-6) han compuesto su camino. Cinco victorias en las últimas seis semanas los colocan como uno de los equipos más encendidos de la NFL y, gracias a la mediocridad de la NFC, muy probablemente se cuelen a Playoffs sin sufrir de más. No obstante, para ello, primero deben vencer en el Nissan Stadium este jueves por la noche a los Titans (9-5), quienes, a pesar de tener un récord similar, acarrean un ritmo totalmente distinto.
Estas son dos franquicias que no suelen verse tanto frente a frente. A lo largo de la historia (que incluye a Tennessee como Houston Oilers) solamente se han enfrentado en 14 ocasiones, con San Francisco saliendo airoso en 9 de ellas. Dicho lo anterior, los 49ers no han sido derrotados por los Titans en Nashville desde hace 16 años (noviembre, 2005) y si San Francisco logra hacer valer el buen momento que viven, la racha podría continuar.
Primeramente, hay que darle un crédito inmenso al QB Jimmy Garoppolo, quien virtualmente está en su último año con los 49ers, se encuentra jugando a un gran nivel, y con una precisión incomparable. Durante las últimas seis semanas registra 10 TD contra 3 INT y un rating de pasador envidiable de 113.1; con actuaciones como esas, es más que entendible que el novato QB Trey Lance no haya pisado prácticamente ni por error el terreno de juego.
Además, durante dicho periodo, la ofensiva de San Francisco ha promediado 29.1 puntos por partido, en parte, gracias a la tremenda versatilidad del WR Deebo Samuel, quien también ha tenido que fungir como running back por la lesión del RB Elijah Mitchell –quien este jueves se ausentará por tercera semana consecutiva–.
Por su parte, tampoco se puede pasar por alto al DE Nick Bosa, quien lleva seis encuentros consecutivos registrando al menos 1 sack, siendo la mayor racha de capturas en juegos seguidos para un jugador de los 49ers desde 2012, cuando el DE Aldon Smith registró al menos 1 captura en siete partidos al hilo, igualando el récord de la franquicia que también le es perteneciente al DE Dwaine Board (1983), y al DT Dana Stubblefield (1997). Así, al menos un sack en cada una de las siguientes 2 semanas, y la huella de Bosa en San Francisco será imborrable.
Finalmente, aunque a primera vista el récord no lo indique, el ritmo de juego es claro: los 49ers deben aprovechar las carencias ofensivas de los Titans para poder llegar a su novena victoria, seguir firmes en su paso a postemporada y, por qué no, soñar con el liderato de la NFC West, que actualmente le pertenece a los Cardinals con 11-4.
Ryan Tannehill, ¿culpable de las complicaciones en Tennessee?
Si en el apartado superior se habló de las últimas seis semanas de juego de Jimmy Garoppolo, no fue coincidencia. Dicho lapso es el mismo donde parece que al QB Ryan Tannehill se le olvidó como jugar football, registrando por la vía aérea tan solo 4 TD contra 7 INT y un pobre rating de pasador de 75.7, muy por debajo del 117.5 que promedió en 2019, su primer año con los Titans.
Por obvias razones, lo anterior se vio afectado por las bajas por lesiones del RB Derrick Henry, y los WR Julio Jones y A.J. Brown –quien probablemente regrese para este encuentro de jueves por la noche–. No obstante, seamos honestos: Tannehill está muy lejano a ser aquel quarterback que le quitó el puesto de titular a Marcus Mariota, y ello se ve reflejado en que este equipo, de fea manera, ha perdido tres de los últimos cuatro partidos.
Lo anterior se vuelve más alarmante considerando que en cada una de dichas derrotas, Tennessee tuvo al menos cuatro pérdidas de balón (5 ante Houston, 4 en New England, y otras 4 en Pittsburgh), y ahora se colocan como el sexto peor equipo de la NFL en diferencial de turnovers (-7). Por ende, los Titans deben volver al principio básico del football si pretenden ganar de vuelta: cuidar el ovoide, y es que no pueden darse el lujo de registrar una derrota más.
Actualmente, Tennessee es líder de la AFC South con marca de 9-5, pero al igual que todo el año, la Conferencia Americana sigue siendo sumamente volátil, y esta Semana 16 podría ser un parteaguas en la comodidad o complicación en las que se metan los Titans. Una victoria, más una derrota de los Colts ante Arizona, le garantiza por segundo año al hilo el liderato divisional a Tennessee, pero una derrota podría conllevar que su puesto en Playoffs se defina hasta la Semana 18, en el último juego del año.
Por ello, aunque en el papel luzca complicado, los dirigidos por Mike Vrabel deben salir a matarse en el campo cuando reciban a los 49ers en casa. Aún están a tiempo de recuperar ritmo rumbo a Playoffs, pero si finalmente terminaran por hundirse, sería una de las mayores catástrofes de la campaña, y la famosa y muy criticada por los detractores Henry-dependencia terminaría por confirmarse.
¿Podrán los Titans sobrevivir a su cierre de año para asegurar el liderato de la AFC South? ¿Pueden los 49ers soñar con una carrera profunda de postemporada? Te leemos en los comentarios debajo de este artículo y en nuestras redes sociales.
También te puede interesar: