Explicando la “rebelión de los underdogs” en la NFL

 Por Enrique “Henri” B. Franco. Sigue su proyecto en @naciónpatriots y nacionpatriota.com)

La NFL, no ha dejado de sorprender a propios y extraños últimamente. Lejos de estabilizarse, cada semana, parece que estamos a punto de ver nuestras quinielas totalmente en nuestra contra y los grandes favoritos en duelos aparentemente desiguales están cada vez menos seguros.

El actual panorama de postemporada en la NFL

Tras dos semanas de absoluto caos, las consecuencias de las últimos resultados se reflejan en hipotéticos juegos de postemporada al momento:

• Patriots vs Ravens
• Steelers vs Chargers
• Raiders vs Bills
• Falcons vs Packers
• Saints vs Buccaneers
• Rams vs Cowboys

Lo más importante: equipos que entraron a la semana 9 con récord menor al .500, están saliendo de ella con récord ganador, por primera vez en semanas. No aplica en todos, pero los “líderes divisionales” ciertamente no han respondido según lo esperado en las proyecciones iniciales.

Los ajustes de los grandes head coaches de la NFL

Sería precipitado creer que la tendencia será creciente. Después de todo, los equipos cuyos marcadores han sorprendido son entrenados por Andy Reid, Bill Belichick, Mike Tomlin, etc. Obviamente, no todos los head coaches de esos equipos son considerados actualmente en la élite, sin embargo contamos al menos tres campeones del Super Bowl entre ellos. Y los juegos, salvando situaciones como el de Denver vs. Dallas, han sido decididos en los pequeños detalles.

Incluso en ese abultado triunfo de los Broncos, Vic Fangio le dio una lección al siempre criticado HC Mike McCarthy, que nunca aprende a manejar apropiadamente los juegos; bueno, le corrieron 190 yardas a sus Cowboys, dejándolos sin tiempo que desperdiciar.

Sin duda, algo que podemos apreciar en los equipos que, pensábamos, caerían en una mala racha en las últimas semanas, son esas planificaciones a detalle. Todos son capaces de compensar sus deficiencias; por ejemplo, Belichick haciendo que su defensa, maniatada por Cowboys y Saints, pueda de pronto, anotar puntos y dominar el tiempo de posesión; Tomlin recuperando el juego terrestre en Pittsburgh; Reid logrando football complementario de sus equipos especiales y la defensa para aliviar la presión del QB Patrick Mahomes.

Los pequeños detalles

En la NFL hay una frase: “Los malos equipos encuentran maneras de perder, los buenos, de ganar.“ Y ciertamente, lo es. Cuando un equipo es malo en todo sentido, puede vivir la experiencia de los Lions, que aún con mucho corazón, no sirven de nada al final.

Tener un viejo lobo de mar al mando ayuda bastante. Gente como Reid o Belichick es capaz de unir a su gente para tratar de sacar el barco en conjunto. Sus triunfos rara vez se les acreditan totalmente a ellos: su trabajo es poner a la gente correcta, preparando el terreno. No tienen todo resuelto, pero saben que el triunfo es el bálsamo para todo mal.

El mayor error de los Bills, Packers, Cowboys, incluso de los Buccaneers, es venir menos preparados que sus rivales a esos partidos. No podemos dejar de pensar en los duelos donde se las arreglaron con el triunfo en el último instante, aprovechando ellos mismos una desconcentración del rival. ¿Cuántos no creímos que Tom Brady podía dejar Foxborough con una derrota en la semana 4 en el último cuarto, o que los Packers apenas salieron con el triunfo contra Cardinals?

Esas pequeñas grietas de preparación y ejecución, contra los rivales más experimentados, pueden salir muy caro si se repiten. La esencia de este deporte nace en lo difícil que es repetir algo que salió bien casi de milagro la primera vez, y eso es algo que hemos visto en las dinastías frustradas de la última década.

La paridad de la NFL empieza a dejar moralejas

Las caídas de estos contendientes vienen precedidas de lecciones bien aplicadas desde las laterales. Sobre todo, para los aficionados, pues nos acostumbramos a guiarnos a partir de los resultados sin mirar cómo se dieron muchas veces. En el éxtasis el triunfo poco importa ya cómo se dio. En cambio, la derrota magnifica todo defecto, nos hace más conscientes de los límites.

Ante todo, la NFL nos recuerda que este deporte, por mucho que sea ejecutado brillantemente por Brady, Mahomes, Justin Herbert, Derrick Henry, etc. se trata de un equipo contra otro en el campo.

La semana 9 ha ido cerrando con un Kansas City anotando apenas 13 puntos, pero con un esfuerzo sobrehumano por evitar que les anoten más de 7 puntos; con Denver imponiéndose defensivamente, luego de que todos creyeran que el LB Von Miller era su única estrella en esta unidad y principalmente, con Mike Vrabel y los Titans, tan cuestionados sin su RB superestrella, ganando con holgura frente a los Rams llenos de talento “All-Star”.

Este 2021 arrancó con nosotros, los aficionados, hablando de una “liga de quarterbacks”. No obstante. es preciso recordar que se gana o se pierde en equipo. Ni Dak Prescott, ni Matthew Stafford, Josh Allen o Joe Burrow pueden ser de élite por sí solos. Quienes están detrás de ellos fueron superados para significar derrotas, con actuaciones cuestionables en el manejo del partido.

Es válido pensar que, así como los que vienen de malas rachas por decisiones cuestionables, los “favoritos”, están cayendo en el mismo problema. La NFL se reajusta, necesita de uno y de otros, esta semana es de esta manera, la próxima, quien sabe. Como dijo Al Pacino en Any Given Sunday: “Todo se reduce a curarnos como equipo, o nos derrumbamos, jugada a jugada, pulgada a pulgada, hasta el final.”

¿Será posible llegar a ver un Super Bowl entre los underdogs en febrero 2022 o en el futuro cercano? Posiblemente. En enero hay un breve reinicio, se olvidan los récords y un poco del pasado. La AFC parece el lugar ideal para que esto ocurra, pues las sorpresas las han dado principalmente sus equipos; mientras que en la NFC todo parece indicar que las únicas sorpresas podrían darse entre los que ya están en la cima.

¿Qué lecciones te han dejado estas dos semanas de “La rebelión de los underdogs” en la NFL? Te leemos en los comentarios bajo este artículo y en nuestras redes sociales.