La nueva era de los quarterbacks en la NFL llegó para quedarse

Por Enrique “Henri” B. Franco. Sigue su proyecto en @naciónpatriots y nacionpatriota.com)

Dicen que “más sabe el diablo por viejo que por diablo” pero lo cierto es que la NFL está yendo en contra de este dicho popular y lo vemos desde sus protagonistas este año. Sin duda, es interesante recorrer ambas conferencias de la liga para cerciorarse de que existe una contienda cada vez más llena de juventud, lista para tomar la batuta en el futuro cercano. Asimismo, es increíble un común denominador en todos los casos: madurez y efectividad.

La contienda de los nuevos quarterbacks en la AFC

La Conferencia Americana es una parada obligada para detallar el aspecto de madurez a temprana edad, con los casos de los pasadores Lamar Jackson, Joe Burrow, Justin Herbert, Josh Allen y Patrick Mahomes. El primero porque ya tiene 35 triunfos en la NFL antes de cumplir los 25 años, superando a un inmortal, Dan Marino.

En los casos de Herbert y Burrow, cambiando por completo el panorama de franquicias acostumbradas a la mediocridad en años recientes como Chargers y Bengals respectivamente; pero esto es una tendencia reflejada en los casos más avanzados como Josh Allen en los Bills o hasta Patrick Mahomes en los Chiefs. Este último, bastante más claro cuando nos remitimos a su partido más reciente, en el que se negó a salir con una derrota de un partido totalmente en su contra.

Pero lo anterior solo parece repetirse con la clase de este año con Mac Jones y el Trevor Lawrence, ambos en panoramas un tanto desoladores en sus respectivas franquicias (Patriots y Jaguars, respectivamente), sin mucho por pelear este año, aun así podemos asegurar que sus pocos triunfos combinados este año podrían atribuirse a la pelea que ellos dan en cada partido.

La NFC no se queda atrás

Desde luego, los casos de la Conferencia Nacional como los de Cardinals, Cowboys y hasta Eagles profundizan en este rubro. Es evidente que, tras 2020, en Dallas atribuye su fortaleza en ataque a Dak Prescott, construyéndose para vencer desde su brazo y lo mismo ocurre con el esquema ofensivo del coach Kliff Kingsbury en Arizona, donde su promedio en avance es de 8.9 yardas con Kyler Murray bajo centro y los Cowboys son de las cinco mejores ofensivas por pase de la temporada con 1,835 yardas al momento.

Incluso en casos donde el quarterback pasa a segundo término como los Eagles, este encuentra maneras de proliferar y tenemos el caso de Jalen Hurts, aunque estas sean limitadas dadas sus circunstancias. La nueva tendencia de la NFL ha quedado muy marcada y, se vea como se vea, un éxito se puede determinar en el estado del pasador titular.

La NFL ya es totalmente una liga de quarterbacks

Encabezada por el todopoderoso veterano Tom Brady, podremos ver en este caso un ejemplo que han tomado las nuevas generaciones de quarterbacks en la NFL: más allá de la efectividad de sus métodos, su proceso que va desde el cuidado personal hasta una férrea rutina en el entrenamiento, vemos a más jóvenes tomando estas iniciativas usualmente de los veteranos que solo querían seguir jugando al mismo nivel por un largo tiempo, a pesar de la edad.

Entrenadores personales, dietas especiales y un control mayor en decisiones de la organización, son elementos característicos de estos tiempos en los QB. Hasta un dueño intransigente como Jerry Jones cede algo ante las exigencias de Prescott, no buscan más que la estabilidad del proyecto desde su propia retención con el equipo. Y luego, en casos como el de los Chargers, que dan un giro de 180 grados en la manera de trabajar con decisiones mejor estudiadas, como traer a alguien mucho mejor preparado a dirigirlos (Brandon Staley), todo en pro de su pasador.

1983 fue otra era de jóvenes quarterbacks en la NFL

Es cierto que esta no es una era inédita en la prevalencia de jóvenes figuras como pasadores, ya en 1983 con Tony Eason, Dan Marino, John Elway y Jim Kelly se hablaba de una generación sin igual, que se sumaba a los líderes de la época como Joe Montana. Pero al final, este pastel no se reparte equitativamente: solo puede haber un campeón por temporada y en aquel entonces, solo uno fue verdaderamente campeón de la clase del 83: John Elway. El resto fue más bien llenándose de logros individuales y decepciones colectivas.

Esta es una tendencia que puede repetirse en la NFL hacia el cuarto del siglo XXI, pero no por ello quiere decir que será idéntica. Ahora, con una mayor velocidad en los procesos de cada equipo, la NFL asoma una marcada diferencia con el pasado. En contraste con esa época ya lejana, los equipos viven a un ritmo joven: con ímpetu, sin pensar mucho en el mañana y más bien listos para explotar ahora.

Un contendiente puede nacer simplemente por la decisión en esta posición y también pueden acabar un proyecto con ella; sin embargo, es claro que los equipos se la van jugar por un quarterback como hombre-orquesta para rodearlo de un buen equipo.

Conclusión

Esta Temporada NFL 2021 marca un aparente hito en cuanto a número e influencia de estrellas en la posición de QB. En un aparente cambio de política desde las gerencias generales (ir a cuentagotas, en detrimento de clases enteras como  2013 o 2015), desde 2017, cada año ha ido dándonos quarterbacks jóvenes cada vez mejor preparados desde nivel colegial.

También asistimos a un cambio en las manera de hacer las cosas en una liga con costumbres definidas, ahora más preocupada por favorecer el juego y el espectáculo aéreo a la ofensiva,  pero también por la salud personal, con jugadores menos callados y más proactivos en otras facetas que no solo corresponden al terreno de juego, que exige un nuevo tipo de liderazgo desde y para el QB.

Esto fomenta un avance increíble en partes iguales, pues puede que incluso un pasador sea la excusa para darle un giro a una franquicia más fácilmente. Pero no todo es perfecto, más allá de los logros y sucesos individuales como los que nos acompañaron esta semana, también es evidente que no todos los prospectos pueden tener el mismo éxito. Ahí está Tua Tagovailoa como caso más actual y emblemático.

¿Qué te parece esta nueva era de quarterbacks en la NFL? ¿Qué otro caso agregarías a estos jóvenes exitosos? Te leemos en los comentarios bajo este artículo y en nuestras redes sociales.

Deja tu comentario