Los Bills tienen mucho por mejorar para ser contendientes
Nada está definido con los Buffalo Bills de 2020. Tras haber perdido dos encuentros al hilo sin jugar bien contra los Titans y los Chiefs, el cuadro de Sean McDermott llegaba a la semana 7 para enfrentar a los Jets, que no han ganado en esta temporada. Este partido pintaba para ser el colchón y el trampolín para recuperar su nivel dominante pero, a pesar de que ganaron, no se vieron nada contundentes ni determinantes.
Para poner en perspectiva lo que fue el partido de los Bills, el K novato Tyler Bass se convirtió en el primer pateador de primer año en intentar ocho goles de campo en un partido. Además, es el tercer kicker en la historia de la NFL en tener dicha cantidad de intentos de FG en un juego. Bass convirtió 6 de los 8, conectando su intento más largo de 53 yardas y anotando todos los puntos de Buffalo en el encuentro.
Bills rookie kicker Tyler Bass gave the Bills an 8-point lead on his 8th FG attempt of the game
His 8 field goal attempts are the most by a rookie since the 1970 merger, and ties 3 other kickers for the most by any player in a game in that span
— NFL Research (@NFLResearch) October 25, 2020
La ofensiva se vio bastante errática dentro de la zona roja a pesar de que el QB Josh Allen no tuvo un mal partido, ya que terminó con 30/43, 307 yardas; 11 acarreos y 61 yardas. Mantuvo el liderazgo y la contundencia para avanzar en las series ofensivas, pero no fue atinado en la zona importante y se fue sin anotar por primera vez en esta temporada.
Asimismo, el ataque terrestre sigue siendo un grave problema en este equipo. El RB novato Zack Moss regresó y está nuevamente presente en el sistema de dos corredores de los Bills junto a Devin Singletary, pero ni así son efectivos. Entre los dos, se combinaron para 15 acarreos, 76 yardas con el jugador de primer año siendo más eficiente al registrar un promedio de 6.7 yardas por intento.
Por lo menos en términos defensivos sí aprovecharon al rival que tenían enfrente. A pesar de que el QB Sam Darnold regresó a los controles de los Jets, apenas le permitieron 120 yardas por pase y le interceptaron en dos ocasiones. Por otro lado, los Bills venían de permitir 28 puntos en promedio por partido y esta ocasión apenas dejaron que New York anotara 10.
Incluso se reflejó estadísticamente el dominio en defensa, ya que finalizaron con 5 sacks, 2 intercepciones y 1 fumble forzado y varios jugadores brillaron en este rubro:
- LB A.J. Klein: 6 tackleadas, 0.5 sacks
- S Jordan Poyer: 5 tackleadas, 1 sack
- DE Trent Murphy: 3 tackleadas, 0.5 sacks
- DE Jerry Hughes: 6 tackleadas, 2 sacks, 1 intercepción
- S Dean Marlowe: 2 tackleadas, 0.5 sacks
- CB Tre’Davious White: 4 tackleadas, 0.5 sacks
- CB Dane Jackson: 3 tackleadas, 1 intercepción
¿Cómo están parados los Bills en este momento?
Por lo menos sus únicas derrotas fueron ante rivales de potencia, debido a que Tennessee y Kansas City son de los contendientes en la Conferencia Americana. En términos generales, los Jets deberían ser un rival fácil pero al ser un partido divisional puede entenderse que haya sido complicado ganarlo. La cosa es que en noviembre tendrán que volver al nivel con el que se pusieron 5-0 para abrir la temporada.
En este mes enfrentarán a:
- Semana 8: vs. New England Patriots
- Semana 9: vs. Seattle Seahawks
- Semana 10: @ Arizona Cardinals
- Semana 11: vs. Los Angeles Chargers
Son cuatro rivales complicados que pondrán un duro desafío para los Bills, quienes tienen que ganar al menos tres partidos de estos enfrentamientos para confirmarse como un contendiente en la AFC. Incluso, con eso podrían consolidarse para pelear por el primer puesto de la conferencia. Tienen un buen equipo en balance, pero deben volver a ser consistentes como arrancaron la campaña. Sobre todo ser efectivos y anotar TD en red zone.
¿Crees que es momento de apanicarse con los Bills o tienen todo para ser contendientes en la AFC? Te leemos en los comentarios.