RB Miles Sanders de los Eagles y DE Jadeveon Clowney de los Seahawks. Foto de Getty Images.

¿Qué tanto benefició el pass rush a los Seahawks?

A pesar de que en la temporada regular los Seattle Seahawks terminaron en décimo primera posición (empatados con los Ravens, Lions y Texans) en capturas por equipo, su pass rush no había sido tan decente, sobre todo por la cantidad de tiempo que le permitían lanzar a los QB rivales. Sin embargo, y con todo y que hubo deficiencias, ante los Eagles fue un factor importante para avanzar a la Ronda Divisional.

Con dos titulares lesionados en la línea ofensiva de Philadelphia (el RG Brandon Brooks y el RT Lane Johnson), el front 7 de los Seahawks debía aprovechar para meter presión a Carson Wentz. Si bien terminaron enfrentando al veterano Josh McCown, lo hicieron de forma efectiva. Por conducto de seis jugadores diferentes consiguieron siete capturas en el partido. En la semana 12 contra los Eagles, Seattle terminó con seis sacks.

Los jugadores que registraron las capturas fueron el S Bradley McDougald, los LB K.J. Wright, el novato Cody Barton y los DE Jadeveon Clowney, Rasheem Green y Quinton Jefferson (2).

Sin embargo, siempre hay espacio para las observaciones. Hicieron un magnífico trabajo al derribar en siete ocasiones al QB de Philadelphia, pero hubo muchas jugadas en las que los Eagles lograron avanzar gracias a que faltó presión. En 2019, Seattle mandó blitz únicamente en el 26.9% de sus jugadas. Tiene que terminarse ese miedo de Pete Carroll por mandar carga extra contra el QB.

Esto último es especialmente importante orque en la Ronda Divisional enfrentarán a Aaron Rodgers en Green Bay. El QB de los Packers es uno de los mejores, sino es que el mejor, para realizar jugadas grandes cuando tiene más de 3 segundos para tomar una decisión. Si Josh McCown fue capaz de generarles por su cuenta, Rodgers puede que haga aún más daño.

La mala noticia es que el DE Ezekiel Ansah salió lastimado hoy y no regresó por una molestia en el cuello. Si bien no ha sido determinante con Seattle, no deja de ser una baja considerable. Será interesante cómo cubren su ausencia en caso de que no pueda jugar en Lambeau Field y qué tan efectivo será el front 7 con sacks como lo fueron en Philadelphia.

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