Los Redskins cortan a D.J. Swearinger tras sus críticas al staff
Después de perder ante los Titans, el safety D.J. Swearinger criticó abiertamente al coordinador defensivo Greg Manusky por su plan de juego, calificándolo de “horrible”. Este día los Redskins decidieron dar de baja al jugador, y esta es nuestra reacción inicial al respecto.
En una temporada en la que las cosas comenzaron de muy buena manera para Washington, con marca de 6-3 y un aparente boleto a playoffs en camino, el panorama se complicó con la lesión de Alex Smith, quien sufrió una fractura compuesta de tibia y peroné, misma que ha puesto en duda su futuro en la NFL. De hecho, todo se complicó tanto que el equipo tiene marca de 1-5 sin Smith, y la temporada comenzó a caer en una espiral que llegó al sábado pasado, con una derrota más ante los Titans.
Tras ese encuentro, Swearinger, uno de los líderes de la defensiva, criticó duramente a Greg Manusky por establecer un sistema defensivo en el que se mandó cobertura hombre a hombre en lugar de zona, permitiendo que Blaine Gabbert encontrara abiertos a sus receptores en diversas ocasiones, e incluso generó un castigo por holding en la serie donde los Titans consiguieron el TD de la victoria.
Esas declaraciones no son una situación nueva para este defensivo y hoy se anunció su salida de Washington, en lo que parece un intento de Jay Gruden por mantener a su equipo unido antes del final de la temporada.
¿Quién es D.J. Swearinger?
Hablar de Swearinger es hablar de uno de los líderes defensivos de los Redskins, dentro y fuera del terreno de juego. Esta temporada, su segunda en el equipo, llevaba 51 tackleadas, un sack, un golpe al QB, 4 intercepciones, 3 fumbles forzados y uno recuperado, siendo titular en los 15 partidos de la campaña.
Fuera del campo era uno de los elementos más vocales de la defensiva, siempre abierto a entrevistas y buscando motivar a sus compañeros y a los fans. El problema es que en un par de ocasiones sus opiniones fueron abiertamente críticas contra el staff de Jay Gruden, cuestionando sus decisiones y dejando ver que había una diferencia de opiniones entre jugadores y coaches.
Eso no le agradó desde el principio a Gruden, que en alguna ocasión dijo haber hablado con el jugador para pedirle que hiciera esas observaciones en privado. Esta semana Swearinger se olvidó de esa petición y volvió a hablar mal del trabajo del staff, la proverbial gota que derramó el vaso de la paciencia de su head coach.
¿Qué tan lógico es darlo de baja ahora mismo?
Desde un punto de vista estricto, es la mejor idea. Jay Gruden ha hecho un trabajo interesante desde la lesión de su QB titular, tratando de mantener al equipo unido y compitiendo. Vamos, los Redskins llegaron al juego del sábado con la posibilidad de ganar su división, e incluso estuvieron en la pelea por un boleto a playoffs tras su derrota.
Bajo esa perspectiva, no era lógico criticar al staff de coaches en público. Washington cayó ante Tennessee de manera digna, dando un juego que pocos hubieran esperado de un equipo que tiene más jugadores en la lista de reservas lesionados que nadie en la NFL. El sentimiento generalizado tras el encuentro era que Jay Gruden estaba haciendo un buen trabajo.
Entonces, al dar de baja a Swearinger, Gruden vuelve a dar ese mensaje: no va a dejar que su equipo entre en modo de implosión, no piensa aceptar que los jugadores comiencen a criticar abiertamente al equipo y den la imagen de estar en guerra con los coaches. Y está bien, porque es su trabajo.
¿Cómo va a afectar a los Redskins esta decisión?
Definitivamente lo van a sentir en el campo, pues estamos hablando de uno de los mejores jugadores de la defensiva. Y tal vez sea un excelente examen para Gruden y su staff.
Si Jay Gruden lleva a su equipo al partido contra los Eagles y dan pelea ante un equipo urgido de victoria, entonces se podrá argumentar que Gruden tiene un gran control sobre su roster y que no hay jugadores por encima de él.
Pero si el equipo se hunde ante esto y da un juego fatal ante Philadelphia también será un mensaje importante: se estaría dejando saber que más de uno pensaba lo mismo que D.J. Swearinger, pero nadie más lo quiso decir. Un mensaje claro a Dan Snyder, dueño del equipo.
Así que habrá que ver qué hacen los Redskins el domingo, porque se jugarán algo más que la oportunidad de terminar el año 8-8. Será un juego por el futuro de Jay Gruden como coach de este equipo.