Los juicios de Clark Judge: Nadie lo hace mejor que Tom Terrific
Así es. No puede haber más discusión. No puede haber más debate.
Tom Brady es el más grande quarterback de la era del Super Bowl y tal vez, sólo tal vez, el mejor de todos los tiempos.
Sí, lo sé, habrá una ola de cuestionamientos al respecto, y con razón. Siete Super Bowls y cinco trofeos Lombardi en… ¿16 años? (15 si excluimos el año 2008 en que sólo inició un juego). Aquellos que vieron a Jonny Unitas o a Otto Graham, que fueron a diez Juegos de Campeonato en fila y ganaron 7 van a abogar por ellos, y lo entiendo.
Pero fueron distintas épocas con distintas reglas. Lo que Brady ha hecho es inconmensurable, viniendo en la era del tope salarial que supuestamente pondría fin a las dinastías. Y así fue para todos excepto New England.
En algún momento hubo una conversación llamada Brady vs Montana. Cada uno ganó cuatro Super Bowls y Joe con su récord de 4-4 sin intercepciones. Pero ya no hay comparación. No después de lo que acabamos de atestiguar.
“El mayor regreso en la historia del Super Bowl. El mejor juego en la historia del Super Bowl. Y la actuación más memorable en la larga y prolífica carera de Tom Brady en la NFL.”
A la edad de 39 años, nada menos.
“Quien diga que él no es el más grande – dijo el safety Patrick Chung– “es alguien estúpido.”
Antes del juego, Brady dedicó el Super Bowl LI a su madre, quien ha estado luchando contra una enfermedad durante los últimos 18 meses. Después nosotros se lo dedicamos a Brady y a su colapso, al colapso de su equipo, a rendirse después de caer por 25 puntos en la segunda mitad.
Con la victoria, Brady no sólo afianzó su lugar en la historia sino que propinó un golpe de nocaut al comisionado Roger Goodell y a todos sus detractores, quienes lo etiquetaron como “tramposo” por su supuesto papel en el Deflategate. Pues tenemos noticias: desde que Brady y los Patriots fueron acusados en algo así como la versión NFL de Jaywalking (N. del E: un segmento del show de TV de Jay Leno en el que se hacen preguntas sorpresa para tomar a la gente desprevenida), Brady ha ganado dos Super Bowls en tres años. Honestamente y con justicia.
Para mayor mérito, Brady no mencionó nada al respecto al final, optando por dar crédito a sus compañeros y a los derrotados Falcons, diciendo que “nosotros sólo hicimos algunas jugadas más que ellos”, pero el propietario Robert Kraft no pudo resistir la tentación de hacer un guiño a Goodell… ¿ y quién podría culparlo?
“Muchas cosas han pasado estos dos años” –dijo– “y no creo que amerite mayor explicación. Esta es, inequívocamente, la más dulce (de las victorias)”.
Con ayuda de sus amigos
Los Patriots no hubieran podido completar el regreso sin el Strip Sack a Matt Ryan a la mitad del cuarto periodo. Pero no culpemos a Ryan. La culpa es de quien llamó la jugada, el coordinador Kyle Shanahan, quien, hasta entonces, había estado llamando un gran juego. Pero Shanahan fue para los Patriots lo que Pete Carroll y Darrell Bevell fueron para ellos dos años atrás, llamando la jugada equivocada al momento equivocado.
Al revisar el video de la jugada, los Falcons estaban arriba en el marcador por 16 puntos, con 8 y medio minutos en el reloj enfrentando una tercera y uno en su yarda 36. Tenían alineado a Devonta Freeman, y lo “único” que había hecho era promediar 6.8 yardas por acarreo. Así que solo se trataba de darle el balón y mover las cadenas, ¿verdad?
Nadie le pasó ese memo a Shanahan.“Bueno – dijo el coach derrotado, Dan Quinn– nosotros pensábamos que teníamos una buena oportunidad con base en el personal que ellos tenían en el campo. Confiamos en nuestros hombres, así que pensábamos que era el momento de soltar la jugada. Cuando la jugada no termina a nuestro favor, es fácil cuestionarla.” Él debería saberlo. Quinn estaba en Seattle cuando los Seahawks pensaron que era buena idea lanzar en la yarda 1 en vez de dar el balón a Marshawn Lynch. Así que llamémosle a esto por su nombre: una decisión estúpida.
“Yo no cuestiono nuestro playcalling o el querer lanzar un pase”, dijo Quinn. Muy mal, debería.
Más ayuda de sus amigos
Shanahan tuvo otro momento de estupor cerebral en la siguiente posesión cuando, encontrándose en la yarda 23 de New England, llamó otra jugada de pase en una 2ª y 11. Esta vez el reloj tenía 4 minutos y los Patriots estaban a 8 puntos. Así que tenía un gol de campo fácil al alcance y la oportunidad de forzar a los Pats a usar sus tiempos fuera quemando el reloj (o sea, corriendo el balón) ¡Pero noooooo! Llamó otro pase y Ryan fue derribado para una pérdida de 12 yardas. Ahora, en 3ª y 23 en la yarda 35 de New England, llamó… adivinaron… un pase más, y sí, los Falcons fueron castigados por un Holding. El resto ya lo saben.
“La idea” –dijo Shanahan sobre el primer pase– es anotar tantos puntos como sea posible. De ningún modo era un gol de campo fácil”. ¿No lo era? Hubiera sido uno de 42 yardas y hubiera congelado el partido. Shanahan debe algunas explicaciones.
Quarterback de sofá
Ahora viene la mejor parte: Goodell vs Brady. Los dos se habrán reunido la mañana del lunes en Houston para la entrega del trofeo MVP del juego… a Brady. Y los dos habrán posado juntos para las fotos. Después de lo que escuchamos este domingo por la noche, tenemos la certeza de que no habrá palabras de enojo, y que habrá un apretón de manos.
Pero créanme: a pesar de que Brady declinó llamar a este “el más grande Super Bowl” de su carrera, diciendo que “todos fueron grandes”, este fue más que una victoria colosal. Fue una reivindicación, y aunque Brady no lo diga, su padre lo ha hecho. Y casi con seguridad refleja lo que su hijo piensa.
Otro momento mágico
Los Patriots fueron víctimas en el Super Bowl XLII por la atrapada de David Tyree. Luego les volvió a pasar en el Super Bowl XLVI con la atrapada milagrosa de Mario Manningham. En algún punto, en una galaxia muy lejana, a los Patriots tenían una deuda pendiente. Y la cobraron con una impresionante atrapada de Julian Edelman de un pase desviado que llevó a los Patriots a anotar los puntos del empate. Tuvieron que haberla visto para creerla, pero es suficiente decir que, de alguna manera, un Edelman totalmente descompuesto logró mantener el balón a unas pulgadas de tocar el suelo.
“Nunca vi algo como eso“ – dijo el RB LeGarrette Blount Apuesto que los Falcons tampoco.
1st and 20:
- La NFL puede considerarse afortunada. En el momento que James White anotó en tiempo extra cayó el confeti y las laterales de los Patriots se vaciaron con los jugadores invadiendo el campo. Fue un final perfecto para el mayor regreso de la historia del Super Bowl. Pero entonces alguien se cuestionó si la rodilla de White tocó el piso antes de cruzar la línea de gol, y estuvo cerca. Pero las repeticiones confirmaron la anotación y se acabó el asunto. Pero imagínense si no hubiera sido así. El campo hubiera tenido que ser despejado y se hubiera perdido un hermoso final.
- Pregunta honesta: ¿regreso milagroso o hundimiento de los Falcons? Todo lo que sé es que New England no hubiera podido lograrlo sin la ayuda de Atlanta.
- Tenemos que estar tristes por Dan Quinn. Él fue coordinador defensivo del equipo de Seattle que perdió una ventaja de diez puntos hace dos años en el Super Bowl XLIV y ahora esto.
- ¿Entonces esto significa que veremos a Goodell en New England para el primer juego de la Temporada 2017?
- Blount mencionó que si tuviera derecho a voto hubiera elegido a su compañero James White como MVP del partido y lo comprendo. Él anotó tres veces –incluyendo el TD de la victoria–, tuvo 14 atrapadas para 110 yardas y produjo dos conversiones de 2 puntos. Pero por favor, LeGarrette. Brady pasó para un récord de Super Bowl de 466 yardas.
- Qué apropiado el hecho de que Brady rompiera el récord de Super Bowl de Kurt Warner de 414 yardas por pase. Warner fue nombrado al Salón de la Fama el sábado. Un día después, Brady nos recordó por qué su ingreso al HOF será inmediato.
- Nota curiosa: Los Patriots ganaron un Super Bowl sin haber tenido ventaja en el marcador en ningún momento del tiempo regular.
- ¿Qué es lo que ocurre con los Patriots y las semanas de descanso? Tienen muchos problemas después de ellas. Perdieron en casa ante Seattle esta temporada después del bye y apenas sobrevivieron ante Houston en los Playoffs después de su semana libre. Este domingo les tomó dos cuartos y medio despertar.
- Atención, Stephen Gostkowski: tienes que pasar el Offseason practicando puntos extra.
- Estadística clave: New England sacó 93 jugadas (95 contando ambas conversiones de 2 puntos). Atlanta corrió 46. Sin duda los Falcons se quedaron sin combustible.
- Tal vez Belichick hizo que sus Patriots vieran el show de medio tiempo de Lady Gaga. Necesitaban energía y ese pudo haber sido el remedio.
- Los fans de los Falcons deben verlo de este modo: su equipo se apegó a la historia. Ninguna ofensiva que haya liderado la liga en anotaciones ha ganado un Super Bowl desde los Saints de 2009.
- Números de los últimos 23 minutos y medio: Patriots 31 puntos y 338 yardas; Falcons 0 puntos y 69 yardas. “Cuando ellos se encendieron –dijo Quinn– fue difícil para nosotros dar pelea”. Así parece.
- Supongo que esto significa que el único que puede derrotar a los Patriots es Eli Manning.
- No estoy seguro de lo que Josh McDaniels estaba haciendo en 1a y gol en la yarda 2 de Atlanta en tiempo extra. Se robó una página del playbook de Pete Carroll y lanzó a la esquina de la zona de anotación. Resultó en pase incompleto por fortuna para él, porque fue casi interceptado. Entiendan. con los Falcons aturdidos, es momento de cargar, cuatro veces si es necesario, CON TUS BACKS.
- Van dos trofeos Lombardi seguidos para quarterbacks de 39 años de edad.
- La atrapada de Edelman fue tan buena que eclipsó la atrapada en la lateral que Julio Jones hizo apenas antes.
- Nota para Dan Quinn: la próxima vez hay que cubrir a los backs. Hace dos años Shane Vereen explotó la defensa de Quinn con 11 atrapadas (mayor total del partido) para 64 yardas.
- Los Patriots tuvieron tantos problemas para correr que Brady logró la ganancia más larga por esa vía, de 15 yardas.
- Si los Falcons hubieran ganado, el liniero defensivo Grady Jarrett hubiera sido el MVP. Este jugador consiguió tres sacks para empatar un récord de Super Bowl y cuatro golpes a Brady.
Qué aprendimos este fin de semana:
- Nunca subestimar a Tom Brady. Él derrotó a Peyton Manning tras perder por 24 puntos al medio tiempo. Y ahora esto.
- Nunca cuentes con los Patriots para anotar en el primer cuarto de un Super Bowl. No lo han hecho en siete juegos. Citando a Tom Rock de Newsday, “Buzz Aldrin ha estado más veces en la luna que Tom Brady anotando en los primeros cuartos del Super Bowl”
- Si esta derrota afecta a Atlanta como la derrota en el Super Bowl 50 afectó a Carolina, tendremos un nuevo líder en la AFC Sur en 2017
- Deion Jones es un gran linebacker.
- La experiencia en juegos importantes sí cuenta.
Qué NO aprendimos este fin de semana:
- No sabemos lo que ocurrió con el jersey de Brady. Lo perdió después del juego y le dijo al personal del equipo que no pudo hallarlo.
- Qué sigue para Brady. Dice que quiere jugar por siempre, pero este podría ser un final perfecto para una carrera casi perfecta.
- Cómo afectará esta derrota a los Falcons y a Ryan.
- Por qué le tomó casi tres cuartos despertar a New England.
- Por qué los Falcons se pusieron codiciosos.