Los Bears acaban con el equipo Cenicienta
Sin ninguna complicación, los Chicago Bears derrotaron 35-10 a los Seattle Seahawks en casa y están a un paso de llegar al Super Bowl, ya que el próximo domingo disputarán la Final de la Conferencia Nacional en contra de Green Bay, su odiado rival, en el Soldier Field.
Desde la primera serie ofensiva los Bears dejaron en claro que equipo era superior, y el primer pase que salió del brazo de Jay Cutler terminó en un envió de anotación de 58 yardas al ala cerrada Greg Olsen, quien por velocidad venció a todo el perímetro de Seattle.
En su debut en Postemporada, Cutler tuvo un gran partido, al completar 15 de 28 para 274 yardas con dos anotaciones, y además corrió para dos touchdowns de seis y nueve yardas respectivamente.
Al medio tiempo los Bears construyeron una ventaja de 21-0 y nunca estuvieron cerca de perderla. Con un potente ataque terrestre encabezado por Matt Forte, quien terminó con 80 de las 172 yardas trerrestres de Chicago, y con una defensiva sofocante que frustró todos los ataques de Seattle.
Las primeras ocho series ofensivas de Seattle terminaron en una patada de despeje. Además, la defensiva comandada por Brian Urlacher sólo permitió 89 yardas totales en esas ocho series, incluyendo cuatro de tres y fuera.
Seattle reaccionó en el último cuarto al anotar 21 puntos, pero no fue suficiente ya que sus anotaciones llegaron cuando la defensiva de los Bears ya se había relajado y no podían perder el partido. Matt Hasselbeck tuvo un juego bueno con 258 yardas y tres envíos de anotación, pero la ofensiva terrestre de los Seahawks fue sofocada por completo por Chicago, ya que sólo consiguieron 32 yardas totales en 12 acarreos.
Chicago se encargó de restablecer el orden en la NFL, ya que Seattle se había convertido en el único equipo en la historia en ganar una división con una marca perdedora y hace una semana había sorprendido a los New Orleans Saints, pero el equipo de Lovie Smith se encargó de esfumar las esperanzas de Seattle rápidamente, ya que tres de sus primeras cuatro series ofensivas terminaron en anotación.
Seattle, a pesar de que no cometió ninguna entrega de balón, nunca pudo ejecutar su ofensiva de forma efectiva, y que sólo convirtieron tres de 14 terceras oportunidades y los receptores soltaron cinco envíos de Hasselbeck.